Tómelo como lea que, junto con las festivales de polvo, el Octa también puede manejar las cosas sucias, tradicionalmente el pan y la mantequilla de un defensor. Fuera del modo OCTA, todavía tiene el conjunto de configuraciones de terreno del automóvil normal, solo ahora con el beneficio del aumento del enfoque, la salida y los ángulos de rotura. El curso todoterreno de Horiba Mira se vuelve considerablemente más difícil de lo que puede ver en las imágenes en estas páginas y nuestro auto de prueba lo superó.
Y así hasta el camino. Mucho se ha hecho del potencial de OCTA para la dinámica que desafía el ancho, el peso y la altura y, en muchos aspectos, la exageración está bien ganada. El OCTA tiene una respuesta de dirección marginalmente más rápida que el defensor regular, pero la verdadera razón por la que se siente mucho más ágil y, francamente, manejable que sus compañeros de alcance estándar con la nueva suspensión reticulada. Especialmente en modo dinámico, la resistencia del automóvil al tono y la sentadilla se reduce notablemente, y aunque los movimientos de rollos comienzan de manera familiar, se reducen rápidamente y el cuerpo es hábilmente compatible.
Para cualquier defensor que se comporte así es notable, sobre todo en el contexto del sobre amplio todoterreno de la OCTA. Además, el OCTA conserva la manera natural del automóvil normal: la facilidad y la fluidez que resultan de que los movimientos del cuerpo se combinan tan bien con la fuerza de curvas y la entrada de dirección, solo con una ventana operativa mucho más estricta. Significa que, incluso en los neumáticos Goodrich, puede poner el Octa por un camino decente tan rápido como desee, sin tener que preocuparse por las sorpresas desagradables que la topografía podría vomitar.
¿El auto de Octa es un auto conductor, entonces? De alguna manera, sí. Hay una satisfacción aquí, aunque finalmente está tratando con un alto centro de gravedad, geometría que debe hacer frente a escenarios extremos fuera de la carretera y una gran transferencia de peso. Ciertamente, piense dos veces antes de cancelar ese orden de e-híbrido de Cayenne Turbo si es su prioridad.
Por último, y como si el OCTA necesitara otra cuerda a su arco, es la capacidad de gira. En el modo de comodidad, se trata de una marcha lánguida, pero en muchas superficies, el modo Octa mismo produce la mejor calidad de conducción. Combinado con un torque sin esfuerzo, una excelente visibilidad y una dirección precisa que no estremece sutilmente su concentración, como puede en el automóvil normal, el OCTA es una excelente compañía en largos unidades.